Todo el que haya vivido un tiempo en Zaragoza sabe perfectamente que en esta ciudad existe una esquina lenta. Un lugar muy céntrico en el que la disposición de los edificios provoca una peculiar concentración del viento que casi impide caminar, que frena radicalmente los pasos del viandante, dando la impresión de que en ese pedazo de acera el tiempo se estira extraordinariamente, se roza la eternidad.

miércoles, 27 de noviembre de 2019

Greguerías de noviembre


En las casas viejas y abandonadas, los fantasmas están cubiertos por una sábana para que no se carguen de polvo.

De lejos, la orquesta de cuerda se ve como un montón de charcuteros cortando lonchas de sus violines.

El Rey es como la hache: una huella espectral del pasado.

Hace apenas dos semanas que el Presidente instauró el estado mínimo, y ahora dice que no lo encuentra, que no recuerda dónde lo puso el viernes por la noche.

En los parlamentos deberían sortear los asientos entre los diputados, o sentarlos por orden alfabético. Podríamos empezar por ahí.

Mi vida no tenía sentido hasta que te conocí, oh, enemigo.