Todo el que haya vivido un tiempo en Zaragoza sabe perfectamente que en esta ciudad existe una esquina lenta. Un lugar muy céntrico en el que la disposición de los edificios provoca una peculiar concentración del viento que casi impide caminar, que frena radicalmente los pasos del viandante, dando la impresión de que en ese pedazo de acera el tiempo se estira extraordinariamente, se roza la eternidad.

martes, 31 de diciembre de 2019

Greguerías sobre música



Dedicatoria de un libro de música: parapapá.

El instrumento musical que se toca con mayor esfuerzo es el contrabajo.

Pies de pianista.

Un campo de violinistas mecidos por el viento.

Botero no consigue pintar violines: siempre le salen contrabajos.

¿Las canciones alegres gastan más electricidad que las tristes?

El piano es una complicadísima máquina de volar.

Vivir en la burbuja de una canción, en ese mundo flotante, álgido y perfecto, hasta que estalle, y entonces saltar como un acróbata al siguiente mundo-canción, con su particular clima, con su irrepetible vegetación emocional, e ir así huyendo en el último momento, con arriesgados saltos, a medida que los planetas se extinguen, y esperar que siempre quede uno más a nuestro alcance, pues lo contrario supondría caer sin red, descender todo lo ascendido, y estrellarse en todo el silencio, donde, durante todo este tiempo, nos esperaban las pacientes fieras blancas, con todos sus dientes.



sábado, 28 de diciembre de 2019

Greguerías sobre el escritor y la escritura


En agosto de 2015, el geólogo Raúl Pérez descendió los 1.600 metros de la sima del Cerro del Cuevón, la más profunda de España, y a su regreso pudo confirmar a los medios que tampoco allá abajo se encontraba la inspiración.


En la ceremonia, el joven escritor inédito se sitúa disimuladamente junto al escritor de prestigio, y se siente reconfortado al comprobar que él tiene más altas aspiraciones.

La vanidad de la fama, de acuerdo, pero no hay nada más insoportablemente vanidoso que creerse por encima del aplauso del mundo.

En la Galaxia Gutemberg, los clásicos son agujeros negros que crecen sin cesar engullendo otros textos.

Todos los escritores son médiums de su otro yo.

El escritor, como las partículas elementales, es un fenómeno que no puede ser observado directamente, sino apenas por los rastros que deja.

El escritor es un complejo ser de fósforo que apenas brilla en la oscuridad durante algún tiempo, después de lo cual, para volver a funcionar, necesita exponerse nuevamente a la luz del día.

Reconozco que mis actuales proyectos literarios son poco rentables. Algo así como querer poner tren de alta velocidad entre dos ciudades abandonadas.